Profesional

SATSE denuncia una nueva agresión verbal y amenazas de muerte en el CS de Vilafranca

Un paciente lanzó amenazas de muerte e insultos tras ser informado de que su caso no era urgente, los profesionales tuvieron que intervenir para evitar una agresión física.

El Sindicato de Enfermería SATSE Baleares denuncia una gravísima agresión verbal y amenaza de muerte sufrida por varias profesionales del Centro de Salud de Vilafranca, donde un paciente reaccionó con extrema violencia al comunicarle que la dolencia de su hija no se consideraba una urgencia sanitaria.

Los hechos ocurrieron en la mañana del miércoles 16 de julio, cuando un hombre acudió al centro con su hija, quien refería dolor en el pie. La enfermera le explicó que los miércoles por la mañana no hay consulta médica ordinaria, y que debía acudir a su médico por la tarde, ya que no se trataba de una urgencia ni presentaba signos de gravedad. En ese momento, el individuo entró en cólera, comenzó a golpear el mobiliario, a insultar gravemente al personal presente y a proferir amenazas como: “esta no está haciendo nada, sois unos inútiles, os vais a enterar, ya veréis, hijos de puta, no queréis hacer nada”.

La situación se volvió aún más grave cuando se dirigió directamente a una de las enfermeras y le gritó: “voy a venir a por ti, ya verás lo que te va a pasar, te vas a morir, te voy a matar”. El hombre llegó a abalanzarse sobre la profesional con las manos por delante, y fue un médico quien se interpuso para evitar la agresión física.

Un paciente reincidente

Durante el incidente, también profirió insultos de carácter xenófobo y extremadamente ofensivos: “Me cago en todo, soy mallorquín y me tenéis que atender, putos vagos”. Ante la gravedad de lo sucedido, se presentó denuncia formal ante la Guardia Civil por amenazas de muerte.

SATSE Baleares condena enérgicamente este nuevo episodio de violencia hacia el personal sanitario y recuerda que no es un hecho aislado: se trata del tercer miércoles consecutivo en que este individuo acude al centro con actitud hostil. En esta ocasión, la situación escaló hasta un punto límite, poniendo en riesgo la integridad física del personal.

El sindicato recuerda que este tipo de actos deben ser denunciados penalmente y tratados con la máxima contundencia.